REPORTE DE LECTURA N° 6: 

Algunos de los cardenales pensaban que se la había perdido el sentido del tiempo al camarlengo, pero Mortati lo dudaba, pero este prefirió callar.

Era consciente que la mayoría de los cardenales apreciaban poco al camarlengo, pues ellos creían que este era muy joven para ser Papa.  Mortati sospechaba que era por celos, y admiraba al Papa joven y en secreto aplaudía la elección del Papa fallecido; solo veía convicción cuando miraba a los ojos del camarlengo que anteponía la iglesia y la fe a la política.

Aunque la devoción del camarlengo se había hecho legendaria, muchos lo atribuían al acontecimiento milagroso de su niñez, un acontecimiento que había dejado huella indeleble en el corazón de cualquier hombre.

Mortati sabía que para desgracia de la iglesia, el camarlengo nunca llegaría a Papa cuando fuera mayor. Acceder al papado exigía cierta sabiduría política. En muchas ocasiones había rechazado las ofertas de ascenso del Papa, pues prefería servir a la iglesia como un simple sacerdote.

Los Illuminati habían reanudado una antigua enemistad. Una venganza aplazada durante cuatrocientos años, daba la impresión que tres siglos de persecución, la ciencia se había desquitado.  

Dentro de los planes de Olivetti y el camarlengo era interrumpir la elección del nuevo Papa, ya que pensaban que habría algún artefacto en el vaticano que acabaría con la vida de los demás, se tenían que ahorrar las vidas de los demás cardenales porque estos son los cimientos de la iglesia católica.

Alguna vez se mencionó que un Papa es un hombre dividido entre dos mundos, el real y el divino, se advirtió de que cualquier iglesia que hiciera caso omiso del real no sobreviviría para disfrutar del divino. El orgullo y los precedentes no pueden imponerse a la razón.

Sabían que la Capilla Sixtina es una fortaleza, el edificio esta reforzado y puede repeler cualquier ataque, excepto el de los misiles, para prevención, se peinara cada centímetro de la capilla en busca de micrófonos ocultos y otros aparatos de espionaje.

Otra preocupación que existía era calcular el radio de la explosión, la zona de roma estaría en grave peligro, todo esto dependería de la ubicación del explosivo, si fuera bajo tierra o en alguno de los edificios centrales.